sábado, 17 de octubre de 2015

A la colega periodista bielorrusa, ganadora del nobel de literatura, le confieso que también soy homo gringus




Me despierto temprano y por la tele escucho los briefs matutinos de CNN en castellano, así ya estoy con información en desarrollo. Me levanto y voy al aseo personal con pasta dental Colgate y jabón Palmolive. 
Vivo en un barrio popular guatemalteco, desayuno en Mcdonald's o Burger King, hago un poco de jumping mientras camino cinco cuadras. 
Ya sé que habrá mucha gente en fast food, excesivos a mi gusto. 
No quiero oirlos y siempre uso audífonos con música gringa, además para taparme los oídos. Lo mismo haré al atardecer. Luego de cumplir mi jornada laboral degustar un cartón extragrande de cofee starbucks, mientras chateo facebook con mis amistades virtuales.

Había olvidado contarte que uso jeans y tenis made in usa, aunque no sé si son falsificados, no importa, me interesa mi apariencia anglosajona. Calzado y ropa americana decimos, y es bien vista. La verdad es que casi todos vestimos igual, aspiramos a una vivienda igualmente de estilo californiana, hablamos igual, pero no propiamente en castellano sino calcos, préstamos, traslaciones, neologismos, anglicismos. Uno de los calcos que más nos gusta es empoderamiento,  mascota es otro préstamo que nos encanta.

Por supuesto lo máximo para homo gringus, mujeres y hombres,  es dominar el idioma inglés. Hablarlo bien. Sostener una conversación. 
Actualmente nuestros hijos e hijas ya hablan el inglés en esta Guatemala con más de 25 idiomas nativos. Ahora mismo mi hijo adolescente debe tener puesto su casco con audífonos en el deleite por Austin Mahome y disfrutando su videojuego call of duty para matar a Fidel Castro. 
A ti que te gustan los testimonios sobre homo sovieticus te puedo compartir que hace poco le pregunté a un niño indio, lustrabotas callejero, si le gustaría aprender bien el castellano y él me respondió: -quiero aprender inglés. Su lengua nativa es el quiché, tan desconocida como el bielorruso.
Yo soy homo gringus desde la infancia: no me interesaba la escuela ni las matemáticas, pero sí los cómics de superman, el llanero solitario, batman, dick tracy,  red ryder, tarzán, popeye, la pequeña lulú,  mujer maravilla, capitán américa,  pato donald, hopalong cassidy, jesse james con sus respectivo cómic y ficciones de película.
Jugaba diariamente a cowboy contra indios y me ponía mal hacer de indio.
Sentí mucha vergüenza cuando años después por la historieta mexicana Los Agachados me enteré que el cómic halcón negro era vulgar propaganda anticomunista, pero era demasiado tarde, yo estaba ya formateado como homo gringus, una capa de personalidad superpuesta a la del aindiado, castellanizado, mestizo guatemalteco que se mueven en mí contrariado  homo gringus. Precisamente hoy pensaba escribir sobre lo criollo español y el mestizo como rasgos del carácter guatemalteco.
Luego de los cómics pasé a ilustrarme con revista Selecciones reader's digest y Life pero solamente en castellano. Tratando de probar  lo mejor ingresé al club del whisky, pero como lo gringo se apoderó tanto de mi tuve que convertirme en anonymous, terapia alcoholics anonymous proveniente de Akron, Ohio, pero siempre en voces castellanas, aunque lea en inglés desafortunadamente no puedo comunicarme en esa lengua mundial.  
Como eres buena periodista te gustan las malas noticias, entonces te confío dos que son suficientes para entender mi retorcido american way:
Los gringos o estadounidenses experimentaron en Guatemala hacia 1950 vacunas contra la sífilis infectando muchas personas. Eso en el campo de la medicina.
Nos invadieron militarmente en 1954 para derrocar al gobierno comunista que pretendía nacionalizar la bananera united fruit company, entre cuyos propietarios estaban el director de la CIA y el secretario de estado: ambos hermanos Foster Dulles.

Desde entonces nos  han convertido en cada vez más homo gringus.

En este momento quieren imponer de presidente a un imitador de malos chistes que se llamaba James y hoy es Jimmy. Este homo empezó su propaganda electoral en United Estates para que después sus slogans resonaran acá en Xibaltepec-Guatemala.
No sé quien será peor, si tu Lucashenco o nuestro Jimmy,  pero este si es un transparente homo gringus con el agravante de cristiano evangélico fiel seguidor de Benny Hinn el pastor de los supermercados de la fe.
Acá, Svetlana, hay muchos mall legales e ilegales, religiosos y profanos.
Te he llamado Svetlana porque de veras me seduce tu nombre, me encanta tanto  como Nadja. 
He leído un testimonio de tu libro  Voces de Chernóbil, el de la mujer embarazada, la mujer del bombero y me ha parecido una buena entrevista, sin ser un reportaje directo desde el lugar de los sucesos, como si hizo Anna Politkóvskaya, hasta que el encono de los poderosos la aniquiló a balazos.
Siendo periodista ahora obtienes un premio nobel de literatura que también lo merecieron Anna y especialmente Ryszard kapuscinski, con más de 15 libros traducidos al español, incluido el extraordinario Ébano, sobre la destrucción del África por la desmesurada codicia occidental.
Eso de los premios literarios deja muchas deudas con todo y el montón de dinero, pero tu Nobel me parece políticamente descarado.
Quizá el último gran escritor premiado  sigue siendo J. M. Coetzee y eso fue en 2003.
Ahora lo que toca es gastar ese millón y medio de dólares, de los cuales bien podrías dar algo a tus luchadores por la libertad 

Siempre mantengo la esperanza que en la próxima premien a quien sea tan bueno o mejor que Coetzee.


jueves, 3 de septiembre de 2015

cosas impertinentes en la antesala electoral de Guatemala



Con su cuchicheo habitual  medio gay,  medio matoncito:  -Les pido sigan el ejemplo de Gloria.
La t.v. presentadora de  hijos de la política - hdp- responde extasiada:  -muchas gracias doctor.
Gloria Álvarez proclama en su programa una política divertida, puro entretenimiento y distracción.
Tal vez tenga cosquillas en algún órgano secreto.
Álvaro Uribe cuyos delirios paramilitares  rechinan entre  los locos nocturnos de ese gran basurero, centro histórico de Bogotá. 

Colombia, eso sí es eutanasia. 
Uribe y su cartel de Medellín.
Sicaresca es la denominación de tal cultura política, según la ecuatoriana Gabriela Polit Dueñas.

Nuestras otras locutoras son igualmente gloriosas,  entretenidas, graciosas, chulas, pintorescas. 
Tienen nombres igualmente  comunes y corrientes y siempre anuncian alguna depiladora láser  previo a noticiar  el primer macheteado matutino en Ciudad Quetzal, zona considerada roja, y concluyen presentando al mundo de los famosos en Hollywood.  

A eso le llaman aquí  nuevo periodismo interactivo y ciudadano.

Los de apellido masculino son lo mismo aunque un poco más picarescos.  Cuando entrevistan más bien interrogan, cual policía política bien entrenada.

Hoy hasta comunican órdenes de ir a votar, financiados por USAID estadounidense, violentando la libertad del abstencionismo: "Los ciudadanos gozan de absoluta libertad para emitir su voto y nadie podrá directa o indirectamente obligarlos a votar", según artículo 13 de la ley electoral. 

Personalmente  no creo en fiestas cívicas electorales, menos votar, mientras no fundemos un estado. Esta república es híbrida francesa, yanqui, española, sin incorporar constitucionalmente el carácter de las naciones guatemaltecas. 
 Hay un montón de papeles llamados constitución y normas jurídicas, papelería de abogados para tapar los hoyos de este vetusto asentamiento criminal que es Xibalbá-Guatemala. En próxima ocasión escribiré del estado de cosas. Para empezar, aprendamos a decir mandatario, porque se trata de un mandato, y si no se cumple debe ser revocado por el pueblo, 
Ahora mejor volvamos con la gente de los medios,  periodistas de radio, prensa, televisión. La gran mayoría son gente física y mentalmente vieja, insensible  y rígida, entonces cuesta encontrar alguien, cualquiera que salve la cara. Habrá dos o tres talentos entre el montón de cámaras y micrófonos.
Por supuesto, el mérito es para quienes reportan la noticia desde el lugar de los sucesos sin importar la hora, el clima ni los riesgos del punto. (Pierre Bourdieu estudia el asunto, pero es muy denso)

En Guatemala tenemos corporaciones noticiosas delictivas, ya lo dijo CICIG, institución de la ONU con la última palabra en materia de impunidades según facebook.

Los medios ocultan el dato, la información, el conocimiento, banalizan las comunicaciónes al grado de mera farándula. 
La parrilla es de hierro mohoso: publicidad + programas enlatados + futbol + 15 minutos de información  + celebridades = comunicación. 
Salir  ya de esos numeritos para empezar con un periodismo que aporte algo a la democracia, por  la cual tanto berrean. 

Guatemala no es  la ciudad capital, ni su delgada clase media. Son más los municipios y las comunidades indígenas del territorio interior. Inviten esa gente para que opine, pues ya repiten demasiado los cuatro gatos del mainstream. Esos opinadores  no dan para más, ya liquidaron sus razones.

Sin querer les tomé la medida y no contesten que apague la tele y la radio. En ese caso la mejor salida es apagarse ustedes para encender otra gente comunicadora.
Política comunicativa y comunicación política.
Pero no desacreditar un candidato electoral y acto seguido presentar su spot de propaganda, eso es desinformación cruda.

Alvaro Arzú, alcalde capitalino, autoritario senil, casi 30 años en el poder,  está trabado con que es vasco y nadie lo saca de tal quijotada. Siendo presidente ordenó sumariamente que sus pistoleros asesinaran  a Sas Rompich, un indio vendedor de leche quien  cruzó el camino por donde nuestro jefe de estado hacía su paseo hípico en las afueras  de Antigua Guatemala. INTENTO DE MAGNICIDIO, tituló al unísono la prensa nacional, es decir, todos los tabloides existentes en 1996.   La prensa lo sigue  considerando  dictador benevolente y le han dejado pasar sus corruptas privatizaciones y arbitrariedades. 
Hay mucha más atroz  gerentocracia, pero baste con Alejandro Maldonado Aguirre, presidente recién designado para sustituir al ya encarcelado Otto Pérez Molina. 

El anciano Maldonado Aguirre  fue cómplice en  la invasión estadounidense  de 1954. Desde ese año hasta el día de hoy ha ocupado cargos públicos importantes. Este miembro histórico del autodenominado partido de la violencia organizada, MLN, es nuestro actual presidente,  pero los comentaristas lo califican como notable constitucionalista, jurisconsulto conservador pero idóneo, distorsionando así el mensaje para acomodarlo al papel de moda. 

Exclamación: Caquix sigue como señor de Xibalbá, nuestra Guatemala profunda. 

Pérez dijo una sola verdad para su epitafio: "de nada servirá que me quiten porque el problema es el sistema". Además confesó sobre dos líneas criminales, la segunda son los grandes empresarios herederos del botín colonial.
Cualquiera sabe que aquí hay muchísimas líneas criminales, no solo defraudación aduanera. Corruptos y corruptores es un un modo de ser guatemalteco. 
Más que una telaraña se trataría de rizoma y sus brotes y retoños subterráneos del capital (habría que leer a Gilles Deleuze y eso, Gloria, es muy difícil y aburrido). 

Corrupción es solo una capa, pero en la más profunda se movió el eje de nuestro mundo político y para que vuelva cierta calma faltan años y la CICIG ya no estará para velar nuestras manifestaciones pacíficas. 
Por ahora seguirán los remezones, esperando uno para el próximo lunes 7 de septiembre del 2015.


sábado, 15 de agosto de 2015

Señales que pueden servir en la política de Xibalbá-Guatemala



Tomar en cuenta que Guatemala es un país de pocas palabras. Gente medio callada, susurrante, murmuradora. El medio tradicional con voz baja de boca en boca sigue siendo número uno dentro  la comunicación dada nuestra cultura oral, medio hablada, así sea en castellano o lenguas mayas. 

Esa  curiosa identidad  merece nota aparte. Ya vendrá para leerse.

En buena medida tenemos pocas palabras propias y poca capacidad en pronunciarlas porque tampoco hemos producido un pensamiento y un discurso sobre quienes somos los guatemaltecos. Quizá únicamente José Batres Montúfar con  Las falsas apariencias en nuestra naciente vida republicana a mediados del XIX  haya medio desnudado las instituciones y un tipo de guatemalteco. Aquel poeta hizo lo que las ciencias sociales no logran hacer. 

En política nunca llegamos ni a reformistas, nos da pánico y retrocedemos al supuesto orden eterno de las cosas. Carecemos de un referente clave para responder sobre ¿qué, quién es el guatemalteco? Entonces sale  ese murmullo confuso, esa cháchara inútil, ese ruidito repetitivo que nos  vuelve mudos, enigmáticos cual  estatua maya. 
Uno de esos ruidos lo genera la viejísima  Corrupción.
El enredo en que nos pone esa palabrita es porque tiene a la vez   significados religiosos, morales, políticos, jurídicos entre muchos más. "La corrupción es, en última instancia, un problema moral", sentencia Jorge F. Malen, de los pocos autores con libros publicados  sobre esa cuestión.
Hoy esa es la voz más mentada en Guatemala lo cual refleja nuestra falta de imaginación y conocimiento, pero seguramente el motivo principal  sea su referencia al tabú primitivo, puesto que corrupción es lo intocable, sucio, podrido, pecaminoso, infeccioso, prostiuido, inmundo, innombrable, impensable. 

Hasta hace poco tiempo el único delito sobre  corrupción era al pudor y las buenas costumbres. De repente un día en el siglo XXI ese pudor ya no aparece entre los más de treinta nuevos delitos correspondientes a la Ley contra la corrupción vigente desde 2012, entre los cuales sí están destrucción de registros informáticos, desobediencia, usurpación de atribuciones, cohecho, peculado, incumplimiento de deberes,  malversación, enriquecimiento ilícito, tráfico de influencias,  fraude, cobro indebido.

Adios  aquellos tiempos cuando corrupción únicamente era señalar pervertidos e indecentes, pues hoy incluye cárcel, extradicción y destierro. Hoy nadie quiere ser tachado como corrupto en este país donde hace muchísimos años desapareció la frontera entre lo ilícito y lo lícito, si es que alguna vez existió dicha limitación.

Antiguamente, aparte de ser  condición maldita en la biblia judeocristiana, también la corrupción fue castigada entre los mayas, por ejemplo, cuando se falsificaban semillas de cacao repletas con lodo para hacerlas circular cual dinero legítimo. Había cacao-dinero de buen peso y cacao falsificado. 

Para el siglo XV suficiente recordar a Cristobal Colón,  primer señalado e investigado por un Pesquisidor a causa de actividades corruptas contra el rey de España. También el criminal  Pedro de Alvarado fue brevemente visitado en Guatemala por un juez pesquisidor... hasta contamos todavía una novela romántica titulada El visitador.

Alvarado fue cuadrúpedamente trotador en Xibalbá: vino, masacró indios e indias, luego se fue tras la plata  y murió aplastado  bajo las patas de un caballo en algún sitio mexicano. Pedro de Alvarado fue una real mierda, pero tuvo tiempo de instituir  Doña Oligarquía, imponiendo al cura, el gobernador, los escribanos (futuros abogados) y la empalizada de caballería con suficientes municiones. Tales son las primitivas  instituciones del estado guatemalteco que proyectan su sombra negra a la actualidad. Me pregunto, para qué putas sirve un Estado con semejantes instituciones.

Otra figura colonial es el antejuicio, esa especie de fuero especial, garantía de inmunidad  gracias a la cual se  mantiene en el puesto presidencial ese militar innombrable.

Así pues, en Guatemala  ya tenemos comisionado, pesquisidores y pesquisidoras. 

El Comisionado sirve tanto para pesquisar, averiguar, rastrear  la impunidad, así  como para recordarnos que siempre somos una colonia de USA y si nos seguimos portando mal entonces podría imponerse un estado-policía a imagen de Colombia, ese hermano país con un largo catálogo espeluznante  en corrupciones. 

A mí, turista medio perdido,   me querían comprar el voto electoral dos tipejas en la colombiana Popayán a plena luz del día. En Bogotá cualquiera puede contemplar 3 policías por metro cuadrado (lo que ellos llaman seguridad democrática) además 7 bases militares gringas encima de tal república nacional. 

La cuadratura del círculo es saber cómo diablos imponer la democracia policial colombiana sobre el triángulo norte centroamericano. Porque no se trata sólo de Guatemala, sino unificarnos con Honduras y El Salvador para salvaguardar los intereses estadounidenses

El comisionado Iván Velázquez me cae algo bien, pero  guardando la debida compostura  y dando por sabido  que siendo guatemalteco no puedo aceptarlo incondicionalmente. Dicho amor incondicional son babas maternales que repetimos mecánicamente, sin sentimiento. 

Recordar que soy de Xibalbá:  el guatemalteco sabe odiar, matar, hasta soñar un poco, pero no puede amar, sería pedirnos demasiado no sólo a los hombres también a ellas, hijas de Ixchel. 

Sigo bien en lo que estamos, sigo apoyando al comisionado contra la impunidad, bienvenidas sus investigaciones sobre contrabandistas, lavado de dinero, tráfico ilegal de influencias, sobornos, financiamientos ilícitos, pero mal vista su payasada con los contrabandistas de sandalias, pantuflas, tenis, platos de china, tangas, bisutería barata,  pintalabios, quincalla.  Chinitas e inditos asustados frente al tribunal, en vez de pesquisar a  grandes empresarios como Don Pelayo Llerena y asociados  de ese gremio masculino, globalizado, blanquecino, que se autodenomina cámara empresarial o CACIF. Eso es un comité completamente corrompido (dicho sea de paso doña Oligarquía  es la madre que  parió tal comité) y eso lo sabe el comisionado pero nunca se ha pronunciado al respecto ni lo va a hacer, así de ciega  opera la justicia con los poderes paralelos. 

De la fiscal General Telma Aldana mejor ni hablar porque ella fue puesta a dedo por el tal presidente nacional, aunque después el embajador afroamericano Robinson le retorció a Telma su brazo femenino para marchar juntos en nuestra gran  cruzada contra la corrupción. 

Fiscal  es otra voz medieval que sigue gozando su perturbadora autoridad.

Nótese  la variedad fascinante  de figuras jurídicas, solamente falta la presencia del Gran Inquisidor para exorcizar todo el Estado, aunque aquí  mejor luciría algún  ajkij (chamán) ejecutando una limpia de energías.

Apreciado Dr. Iván:  toda la indiada ahorita (aquí todos somos aindiados, aunque algunos y algunas no asumen esa otra mitad de lo guatemalteco) en este momentito  toda esa gente  lo adora como Tonatiuh, el dios sol, pero mañana quizá quieran quemarlo vivo. Estamos en  Xibalbá y si usted cree que esto es mentira atrévase entonces a mirar los glifos mortíferos en el perfíl físico zoomorfo del periodista, patriota y candidato presidencial Mario David García Velázquez. 

Dr. Iván: ni se le vaya  ocurrir engolosinarse con ese vocabulario jurídico, judicial, penal, condenatorio. Solamente haga su trabajo y misión cumplida. Le devuelvo sus reiteradas declaraciones: "En Guatemala la corrupción es estructural, un modo de hacer las cosas desde hace mucho tiempo" 
Muchísimo tiempo como parte inseparable de nuestra historia social. La conclusión de su razonamiento conduce a eliminar esas estructuras y esas instituciones ya que son la fuente primaria de corrupción. 

Ahora salimos de una vez por todas de su campo jurídico para entrar al mundo de lo político. Las palabras, sus palabras doctor, producen acciones y reacciones.  Esa es la consecuencia lógica de su razonamiento, doctor. El caso es que ya entramos en ese accionar político derivado de su diagnóstico,  tal vaivén  durará varios años, seguramente será más de un lustro con inestabilidad. 

Hay quienes exigen respeto a la Instituicionalidad, porque de no ser así iremos directamente al Caos como si  Xibalbá no estuviera suspendida en el abismo de la incertidumbre día y noche desde katunes inmemoriales.

Por favor entendamos,  las instituciones son creación imaginaria de los seres humanos. Hasta el Estado es un mito.

La cosa importante radica hoy en  que colectivamente podemos quitar instituciones y poner otras diferentes. Incluso  quitarlas todas, ya que nunca fuimos un estado institucional, sino un estado de cosas impuesto desde la colonia española, luego Inglaterra, Alemania, esa minúscula monarquía de Bélgica, y  actualmente seguimos siendo colonia solapada de Estados Unidos. 

Con independencia, soberanía, libre determinación, pero somos colonia de USA.

Podríamos fundar el estado que nunca se fundó, sin pegar parches como reformas electorales y sentimos  miedo hasta de imaginarlo. 

Pero siempre estaremos actuando entre  el caos y el orden, porque el sistema social es abierto,  produce energía y una parte  se disipa en el caos.

Como somos guatemaltecos indefinidos y seguiremos sin producir pensamiento, por lo menos revisen un poco lo que dicen Ilya Prigogine y Cornelius Castoriadis a propósito del caos en las instituciones. 

Por otro lado, recordemos cuando Santiago Atitlán, tierra mágica de Maximón expulsó la desordenada soldadesca del ejército nacional en 1990. Expulsar la soldadesca fue para instituir un nuevo orden indígena que resultó ejemplo político extraordinario.
Y si ya se pudo una vez, entonces se puede hacer más veces en toda Xibalbá-Guatemala 
Ya no tengamos miedo y si viene el caos, pues  a ver qué pasa. A lo mejor ya estamos en el centro del caos, eso es lo más seguro según creo, aunque antes hemos vivido cosas peores como los terremotos cuando camina Kabrakán.  

Mientras tanto hago  votos  de abstencionismo ciudadano  para la ronda electoral que turbiamente se avecina.



jueves, 11 de junio de 2015

Reality shoy guatemalteco en el salón presidencial de los espejos



En el salón de los espejos están dos actores y una voz autónoma que  parece venir del pueblo. 

Otto Pérez: empecé mi desgracia al mes de tomar la presidencia en 2012 con aquel discurso por legalizar el consumo y tráfico de drogas que muchos aplaudieron y nadie tomó en serio...

Embajador Robinson: la embajada tomó nota y mi gobierno oportunamente fijó su posición en contra de ese mal ejemplo.

Voz autónoma: de todas maneras este presidente legalizó a cuenta propia  el narcotráfico y el consumo como ejemplo de economía informal guatemalteca, aunque pagando impuestos para la policía y el ejército.


Oto: quité a la fiscal Claudia Paz  porque ella tenía la intención de  perseguirme por genocidio.

Robinson:  Cuando era candidato le advertimos mantener en su puesto a la doctora Paz,  usted la destituyó general para poner una fiscal bajo sus órdenes...

Voz autónoma:  eso es  parte del esquema Baquiax Baquiax, presidente seudomaya de la corte suprema. Las acciones antisistema del maya Amilcar Pop han desmontado parcialmente dicho esquema. 

Oto: junto con la nueva fiscal Telma Aldana favorecí el ingreso de sospechosos   altos funcionarios para administrar justicia a mi modo.

Voz Autónoma:      movida turbia aprobada conjuntamente por los diputados del partido oficial y la oposición en 2014, bajo el engañoso nombre institucional de Comisiónes  de Postulación, coordinada por el doctor  Carlos Alvarado Cerezo, rector en la estatal Universidad de San Carlos junto al doctor y empresario navarro Félix Javier Serrano Urzúa, rector de la universidad del Opus Dei en Guatemala.  
Otro españolito acusado recientemente como estafador es un tal doctor Pedro Trujillo, director de estudios políticos en la privada universidad Francisco Marroquín. 


Oto: hay tantas anécdotas más para recordar como tantas reuniones con caballerosos y sonrientes jefes de estado, ninguno de los cuales me tira hoy ni siquiera un pedo. Pero faltaba la nota final, quedarme en cueros, mi autodestrucción que puedo recitar de memoria: "La cooperación internacional es una herramienta importante en el marco del pleno respeto a la soberanía y el principio de no intervención. No podemos fortalecer nuestras instituciones subordinando el ejercicio de nuestra soberanía a la voluntad de terceros"

Robinson: imprudente y malicioso discurso en Panamá el 11 de abril 2015  antes de que reventara tanta corrupción.

Oto (ya ni te llamás Otto): no fueron dichas por la soberanía de Guatemala, todo fue para evitar que la Comisión internacional contra la impunidad en Guatemala o CICIG continuara investigando... 

Robinson: el tiro le salió por la culata mi general, eso de la soberanía es puro show, así como la independencia nacional. Usted lo sabe,  Guatemala es nuestra colonia desde hace cien años, igual a Honduras  y El Salvador, las tres repúblicas que ahora son  Triángulo Norte (similar al Triángulo Ixil, cuando usted se llamaba comandante kaibil Tito Arias). Para cumplir esta operación geopolítica hemos desplegados mil marines en las tres colonias bajo el rótulo Alianza para la Prosperidad, similar a nuestra anterior alianza para el progreso. Además ya establecimos en Guatemala el estado de derecho estadounidense y para garantizarlo tenemos en acción tropas y helicópteros en permanente misión militar. 
Sobre el Triángulo Norte y no solamente Guatemala hemos diseñado las siguientes prioridades con el objetivo de garantizar nuestros intereses: Frenar la inmigración ilegal especialmente niños, controlar el tráfico de drogas, combatir las maras, atacar la corrupción, promover transparencia de las instituciones, prevenir el terrorismo, detener la influencia de Rusia y China, garantizar nuestro clima de negocios. En pocas palabras estamos en un juego geopolítico. 

Otío: mejor me quedo completamente mudo.

Voz Autónoma: el embajador también enmudece sobre la cancelación de visas a militares y empresarios corruptores.

Robinson:  recuerde que usted es y seguirá siendo nuestro presidente, encargado de nuestros intereses. Usted es un sub oficial graduado en nuestra Escuela de las Américas, eso fue como un pacto con aquel que mejor ni mentarlo. Usted está condenado a nunca renunciar. Usted entregará el listón presidencial al próximo presidente de turno, que también será nuestro empleado... aunque podemos iniciarle un impeachment como detalle personal, pues como dijeron el vicepresidente Biden, el secretario Kerry y los empresarios del CACIF, comité coordinador de asociaciones agrícolas, comerciales, industriales  y finacieras : "Nadie está por encima de la ley" Entonces lo importante ya está compartido con nuestras amigos actuales del Cacif,  con ellos estamos de acuerdo en cuales serán las manifestaciones políticamente correctas, pero las incorrectas serán castigadas de acuerdo a la constitución de la república. Cacif y mi gobierno juntos vamos a combatir la corrupción, manteniendo la institucionalidad.    

Otío: lo único que quisiera saber es qué me va a pasar el 14 de enero del 2015, cuando salga del salón de los espejos. Esto me tocó por  querer pasarme de listo y prestar oídos a esos asesores incompetentes, doctores de mentira.  La única verdad es que no pude haber sido jefe de la inteligencia militar ni de los servicios de espionaje y contraespionaje. Eso es para gente de veras inteligente. Solo soy sub inteligente, sub militar, sub especial. 

 Robinson: no coments...



 El embajador terminó su show despidiéndose con una leve sonrisa indescifrable. Pérez parece como paralizado contemplándose en los espejos y lo que mira reflejada es la foto de todos los candidatos a las próximas elecciones. 


  El futuro según mi propia  decisión: abstencionismo activo como derecho ciudadano a resistir la corruptela electoral. Escuchar cuidadosamente  al gatopardo: "Si queremos que todo siga como está, es necesario que todo cambie"

Propongo dos acciones al tribunal electoral: En vez de papeletas para sufragio, publicar un aviso con el siguiente encabezado:

                                          SE BUSCAN
por supuesto, con la foto de los candidatos y candidatas de toda Guatemala.

Segunda propuesta: aplicar el polígrafo, aparato de moda, para detectar mentiras inmediatamente después de las promesas proferidas en cada mitin. Esta propuesta dará grandes sorpresas porque el polígrafo reventará de tanta mentira y eso va a producir caos. 





lunes, 25 de mayo de 2015

Esa cierta inocencia de las actuales manifestaciones en Guatemala

  

Cuando digo inocencia estoy hablando de lo que permanece limpio, incorrupto, sano, incontaminado aunque por eso mismo despida un aire de ingenuidad. 
Eso inocente es lo novedoso y lo mejor en las manifestaciones que siguen en marcha al mes de haberse  iniciado. Igualmente novedoso y sorprendente  que hasta hoy no aparezcan noticias de muertes ordenadas por el gobierno en este país de larga data represiva. 
Estas congregaciones públicas las iniciaron jóvenes, muchachos y muchachas recién salidos de la adolescencia, más o menos 20 años de edad. Quien haya participado en la multitud urbana del 16 de mayo 2015 frente al palacio de gobierno tiene que admitir ese viento fresco juvenil. Había viejos y viejas, adultos y adultas, también  niñez pero el ambiente olía a frescura juvenil, para mí el hallazgo más preciado  entre tanto gentío congregado este mes de mayo, agregando que van más de 6 manifestaciones en las provincias y municipios rurales.

Seguramente salieron encolerizados a la calle porque tienen ya conciencia definida  sobre tanta podredumbre y  ya perdieron el miedo al autoritarismo de los jefes. Son una generación liberada del terror, el autoexilio y la censura interior de sus padres y abuelos. 

Esta patojada de mayo del 2015 -la cual parecía dormida- ya hizo historia, suceda lo que suceda.

En el vocabulario psicoanalítico aparece el vocablo investidura tomado de la jerga militar donde se usa para designar las insignias,  grados jerárquicos,condecoraciones,medallas honoríficas, estrellas, camuflajes de combate, traje de gala y demás ostentaciones simbólicas. 
Siempre siguiendo al psicoanálisis se puede e incluso a veces se debe quitar la investidura. Cuando esto ocurre los símbolos y representaciones del poder desaparecen junto a la figura previamente investida de autoridad. En Guatemala la juventud no solamente arrancó la investidura, hizo más que eso al perderle legitimidad, negar su autoridad, exigir renuncia a la investidura. 
Toda esa energía de rechazo se corporizó en el presidente Otto Pérez Molina, quien ya perdió su investidura ante la mirada de la juventud. En análisis psicoanalítico él  terminó completamente desnudo frente a la multitud, desposeídas las insignias del mando. Ahora los jóvenes pueden gritar a todo pulmón que el general en jefe y señor presidente está ahí desnudo y por lo mismo jamás estará  investido como soberano. Terminando el análisis: Otto Pérez Molina  vive la vergüenza pública de su desnudez.
Que te puedan quitar públicamente la ropa es el mayor peligro en la integridad de cualquier persona.  
Así fue como desvestir al jefe permitió a  los patojos liberarse de  apariencias poderosas y reírse sobre una falsa investidura soberana. 
Patojada, pues a la muchachada acá les decimos patojos o patojas, vocablo similar a chamaco, cipote,  chaval  o pibe en otros países. 

 No puedo explicarlo aquí, pero me parece oportuno contrastar el acontecimiento histórico conocido como rebelión estudiantil  del 68 y estas movilizaciones del 2015. Aquellos abuelos actuales  proferían en su discurso "Viva la comunicación, abajo la telecomunicación"   Este mensaje resulta absurdo en las  redes sociales ya que dichas redes juegan hoy un rol importante para las convocatorias urbanas. 

Con todas las grandes distancias y diferencias existe un aire de familia entre aquellos jovencitos en mayo de 1968 y sus nietos del 2015. He aquí una muestra  para identificar dicho parentesco: fueron aquellos rebeldes universitarios quienes construyeron al joven como sujeto activo en el cambio social y de esa construcción se deriva la familia actual, debilitamiento de la autoridad paterna o materna,  las modas,  música como lenguaje juvenil, sexualidad, el gusto como norma estética respetable, atuendo exótico, derechos para los menores de edad, desencantamiento del sistema político, prestigio en la decisión personal, espiritualidades, terapias alternativas, drogas, respeto a la diversidad, marcas individuales, identidad grupal,  actitudes antiautoritarias, y todo lo demás donde la juventud marca trayecto social.
No voy a extenderme sobre este controversial asunto, pero el debate sobre la construcción social del joven como sujeto histórico determinante continúa abierto, aunque algunos se hagan los desentendidos. Dejo planteada la cuestión del 68 porque me parece pertinente en lo que toca a la juventud actual y no solamente de Guatemala sino en muchas partes del mundo.

Por supuesto, ahora son otros los  medios y propósitos. 

Vale aclarar que los medios tradicionales, es decir, prensa, radio y televisión propagan el discurso gastado, despistado, recalcitrante y necio de una vejez consagrada con la impositiva nomenclatura de tanques del pensamiento, expertos políticos, doctores,  analíticos o analistas, consultores, pero todos ellos son pensantes enajenados para el público juvenil, con agravante de que muchos comentaristas  -ellos y ellas a duras penas son meros comentaristas - forman parte en la corrupción del sistema mediático y lo más patético es que no comprenden ni  el discurso ni las acciones juveniles.
La gente joven tendría que exponer en los medios tradicionales su propósito manifiesto por depurar, limpiar, purgar y principalmente edificar un funcionamiento decente tanto en las instituciones estatales como en toda la sociedad. 
No le toca el monopolio del discurso ni a la vejez del 68, mucho menos la ancianidad de la denominada revolución guatemalteca  de 1944 o la contrarrevolución del 54,  tampoco a los difuntos del movimiento unionista de 1920 que derrocaron entonces al Señor Presidente de turno. El discurso ya cuenta con un nuevo sujeto. En este momento le toca a los jóvenes intervenir el discurso de la prensa, radio y televisión.

Las manifestaciones en Guatemala son hoy expresiones éticas, con un contenido político difuso,  aún no suficientemente expresado. Claramente no hay consignas utópicas ni revolucionarias, aunque también claramente hay una densidad moral expresada en la consigna contra la corrupción. Tal es su ethos como carácter, como modo de ser joven,  tal su distinción de inocencia
La juventud seguirá manifestándose contra este sistema corrupto, fraudulento, ilegítimo, ilícito, sistema hecho para negocios particulares y no para solucionar necesidades de la población guatemalteca. Dicho sistema son las instituciones de justicia, los diputados del legislativo y el gobierno ejecutivo, pero también empresarios, centros comerciales, burócratas, oficinistas, negociadores,  traficantes de influencias, presentadores mediáticos,  niñas bien, personajes notables   y familias honorables de acuerdo al modelo mafioso.

Por eso estamos acompañando a la juventud en su actitud,  a ver hasta donde llegan. 
Tener ética no es poca cosa en una Guatemala corrompida de arriba hacia abajo, de abajo hacia arriba, a la derecha tanto como a la izquierda.
Una responsabilidad común ha logrado lo impensable: unir jóvenes de opuestas o diversas mentalidades, unidad en su guerra contra el fraude, la farsa, sobornos, estafas, ratería, podredumbre. Guerra sin cuartel porque la toma de conciencia ya está definitivamente mentalizada entre la juventud. Con esa toma de conciencia se puede afirmar que el 2015 marca un cambio histórico en Guatemala. 
Para la gente vieja resultan incomprensibles las manifestaciones guatemaltecas  espontáneas sin líderes ni jerarquías visibles. Son casi un misterio porque algo así nunca antes había ocurrido y entonces no tienen punto de referencia nacional.

He visto marchar por primera vez  a muchachas y muchachos de universidades privadas junto a la universidad estatal, algo impensable un mes atrás. 

Me hubiera gustado ver también jóvenes soldados caminando a la par de civiles, haciéndose igualmente ciudadanos reclamando justicia frente a sus superiores del cuartel.

Como los jóvenes apenas están empezando a manifestarse, tampoco será extraño mirar juntos a la población indígena, garífuna y mestiza.

Hasta aquí me he referido a la juventud que expresa públicamente una actitud ética en contra de la corrupción. Quedan fuera los jóvenes criminales que quieren dinero grande, rápido, fácil e ilícito. Que se encarguen de ellos otros escribientes y que rindan cuenta al respecto los capos del sistema, quienes  corrompieron de por vida la inocencia de tales criaturas.

viernes, 30 de enero de 2015

No voto, yo soy político de Guatemala


Para Syriza, ojala que no defraude a griegos ni  a los mayas.





Anoche soñé una multitud inmóvil  y silenciosa, rígido el brazo en alto con un sencillo cartel blanco cuyas letras negras eran NO VOTAR. Dormido viví tan extraordinaria maravilla frente al palacio nacional hasta que desperté a la política oscura de Xibaltepec, esta vez en el año 2015 . 

Al amanecer elaboré  ciertos pensamientos, los cuales presento hoy como argumento político  esperando alguna refutación por parte de alguien:

No votar porque el procedimiento electoral deja afuera la mitad de población guatemalteca, cuyos usos y costumbres no tienen nada en común con las nociones del voto  republicano, sufragio universal, democracia liberal  ni diputados parlamentarios. Esos términos son ajenos al indio aunque ritualmente voten movilizados por un clientelismo de feria donde ellos logran un poquito de lo mucho que necesitan. Eso los hace clientes del cacique regional  con reelecciones ininterrumpidas a diputado. Entonces, cuando los indios permanecemos dormidos o despiertos el dinosaurio todavía sigue allí.

No voto pues en Guatemala no hay partidos sino empresas que se activan cada cuatro años a fin de ejecutar negocios privados. Cualquier ciudadano (tampoco hay ciudadanos solamente habitantes) entendería fácilmente que un partido corresponde al mundo político, pero aquí están agarrados por el imán de los dólares para beneficio personal, familiar y el amiguismo. Actualmente hay mediocres empresas partidarias con algún logo como LIDER, PATRIOTA, VIDA, UNE y un resto de microempresas similares. Oficialmente hay entre 20 a 30 partidos, número exacto resulta  imposible saberlo pues algunos  siempre están temporalmente suspendidos y al final de la campaña todos consiguen un hueso, porque de eso trata el negocio.

Yo no voto porque no elijo. 
En esta Guatemala distorsionada históricamente por los gringos (europeo o estadounidense  da igual) el que vota no elige. Verdaderos electores son empresas como Telmex-Claro, Pollo Campero Gutiérrez, Walmart, tv Azteca, tv Albavisión, cementos Novella, cerveza brasileña Brahva, Cerveza Gallo, minera canadiense Montana, agroquímica Monsanto estadounidense y los narcoempresarios de rigor. Esas empresas ofrecen a los candidatos una especie de tarjeta virtual  en caso de ganar las elecciones. Les dan entre  2 a 5 puntos, los cuales podrán cambiar por dinero que los empresarios efectivamente paguen en sus impuestos, cuyo monto dependerá según sea el comportamiento del político de turno. Si son dos puntos sólo alcanzará para surtir al presidente y sus allegados, si dan cinco entonces alcanza para regalar alguna cosita a los habitantes, nunca habrá para educación, salud ni vivienda. Gran invento de las empresas fue dicha tarjeta de puntos para mantener a los políticos en condición de clientes. Ahí alcanza su mejor perfil el clientelismo.  Así no voto, pues no quiero ser cliente, yo quisiera ser ciudadano con influencia en la vida política de mi país y eso empezaría por desmontar el neoliberalismo patente. 

No voto porque no creo en la democracia liberal. No creo  que un desconocido  personaje, inflado por el globo mediático,  me represente en el órgano ejecutivo ni legislativo. Al órgano judicial lo dejaron fuera del denominado voto popular, ese órgano es del voto corporativo. Lo importante para Xibaltepec-Guatemala debe ser un modo político aindiado para superar esta sociedad escindida a causa de imitaciones hacia el estilo gringo. Cada quien con lo suyo, hay diferentes formas para gobernar y Guatemala debe descubrir el camino político que le corresponde. Enfatizo aindiado como forma de reconocer nuestra parte despreciada u odiada debido a siglos con colonialismo mental.

No voto porque incluso carece de sentido  plantear la alternativa izquierda o derecha. Ya dije que la cuestión es destronar al neoliberalismo.

Tampoco voy a votar por el menos malo, ni para demostrar  amor a la patria desnutrida: "¿Dices que el Gobierno nos ayudará, profesor? ¿Tu no conoces al Gobierno?
Les dije que sí.
También nosotros lo conocemos. Da esa casualidad. De lo que no sabemos nada es de la madre del Gobierno.
Yo les dije que era la Patria. Ellos movieron la cabeza diciendo que no. Y se rieron. Fue la única vez que he visto reír a la gente de Luvina. Pelaron los dientes molenques y me dijeron que no, que el Gobierno no tenía madre"
Así hablaba Juan Rulfo en el relato Luvina, con ecos del Popol Wuj. 


No voto porque no creo en el modelo de crecimiento con libre mercado. Ni siquiera creo en el desarrollo, otra trampa tecnológica para expoliar el planeta. Hay que salir de ese desarrollo destructivo.

Creo en un posible cambio de civilización que empiece por cuidar el planeta donde vivimos y eso incluye desvalorizar crecimiento y desarrollo porque son un mal camino.
Soy hombre de la tierra y el maíz, no del capitalismo.
Soy habitante de Guatemala, quisiera ser ciudadano con facultades para elegir un gobierno que empiece una política donde todos puedan alimentarse (no a la comida chatarra) como primera condición para salud y educación.
Primero la alimentación en este país de desnutridos. Sin gente bien alimentada no se puede mencionar salud ni educación, y sería hasta ofensivo utilizar los términos ciudadano o político.

En la multitud de mi sueño muchos vestían una sencilla camiseta con la contundente proclama: NO VOTAR.


Ahora que estoy despierto puedo expresarlo con más palabras: No hay que votar nulo, no hay que votar en blanco, sencillamente no votar.